Las inversiones monetarias son completamente necesarias cuando se emprende un negocio o empresa, sobre todo porque permiten desarrollar el producto o servicio que se quiere poner a la venta, y así, hacer crecer el negocio, sin embargo, pedir mucho dinero podría ser poco rentable.
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Los expertos aseguran que si pides mucho dinero, ya no necesitarás más en un largo tiempo, pero de alguna forma estarás entregando tu negocio o tu empresa a alguien más.
Para evitar esto y tener un mejor control de tu proyecto, lo ideal es contar solo con el dinero que necesitas, porque de esta forma, irás creciendo y generando valor, lo que a la larga te ayudará a conseguir de forma orgánica o natural sin necesidad de invertir más dinero.
Esto no significa que no debas de dejar de invertir dinero, al contrario, debes de hacerlo pero con el objetivo de optimizar la operación, entrar en distintos mercados, posicionar a tu marca, etc., pero nunca por comodidad tuya.
Debes de tener presente que el éxito del emprendimiento no está en la cantidad de dinero que puedas invertir, sino en la adquisición de nuevos y mejores clientes a los que deberás de fidelizar para así ir construyendo la credibilidad de tu empresa.
Además de lo que ya te hemos comentado, existen otro tipo de riesgos de pedir mucho capital para tu negocio.
Señal de alerta
Los inversionistas se alertan cuando un emprendedor llega con ellos a pedir una gran cantidad de dinero para su negocio, porque los hace pensar que el trabajo no se realizó de forma correcta, o que incluso no conoce su propio negocio para tener claro cuánto dinero necesitan realmente.
Presupuesto justo
Es bien sabido que un presupuesto justo obliga a los emprendedores a eficientar los recursos, lo que a su vez les permite optimizar su proceso de operación, ya que es necesario que tomar una serie de decisiones complicadas como cambios o mejoras en sus productos o servicios, nuevas contrataciones, sueldos de empleados, etc.
En caso de contar con una gran cantidad de inversión podría mermar los esfuerzos por mejorar la operación, lo cual, podría significar un riesgo para los inversionistas.
Peligro para la empresa
Tener tanto dinero podría causar grandes daños a tu empresa, debido a que se podrían establecer metas poco realistas en poco tiempo sin pensar en los cambios que se deberían de realizar cuando se les empiece a acabar el dinero, razón por la cual, esas metas podrían no cumplirse nunca.
Y además, los inversionistas querrán un retorno de inversión rápido y por supuesto, tendrán más control sobre tu empresa, lo que eventualmente podría dejarte fuera de tu propio proyecto.
Recuerda que conseguir una buena inversión no debería de ser tu meta o un gran logro para tu empresa, aunque no necesariamente debería de ser algo fatal, pero sí podría obligarte a adquirir malos hábitos.
El afán de conseguir una buena inversión podría llevarte a aceptar malos términos o condiciones, por eso es necesario hacer un plan de negocios que deje en claro la cuánto dinero necesitas y conseguirlo para así llevar a tu empresa al siguiente nivel.
Las inversiones deben de ser inteligentes, no solo emocionales.
