La vivienda es el principal activo en el patrimonio, de ahí la importancia de protegerlo de posibles siniestros como incendios, sismos, robo o asalto entre otros. Una forma de hacerlo, es a través de los seguros para el hogar que sin estar vinculados a un crédito hipotecario, protegen tu vivienda.
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Estos son algunos términos que debes conocer antes de contratar este tipo de seguros:
- Prima: precio del seguro
- Siniestro: Daño que puede ser indemnizado por la aseguradora.
- Póliza: Incluye coberturas, sumas aseguradas, deducibles.
- Endoso: Agrega o restringe cobertura.
- Daños a terceros: Cuando perjudiques a viviendas contiguas con una inundación, un incendio etcétera.
Además considera
- Antes de firmar, lee el contrato (que cubre y que no)
- Declara la verdad sobre el valor de la vivienda, tipo de construcción y acabados, si indicas una suma menor a la real, el monto de la prima disminuye junto con la indemnización.
- Analiza los factores de riesgo, es decir si ocurren frecuentemente terremotos, huracanes, inundaciones, etc.
- No olvides las fechas de pago de las primas, ya que la falta de pago puntual puede ocasionar la cancelación del seguro y la protección que éste ofrece.
- Al asegurarte con alguna compañía, considera la conveniencia de renovar y mantener tu seguro vigente con dicha institución, ya que al cambiarse con otra aseguradora podrías ciertos derechos y beneficios adquiridos.
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Fuente: Revista del consumidor
