Nadie puede discutir que la pandemia ocasionada por el COVID-19 nos ha cambiado a todos. Y los emprendedores deben de adaptarse y comenzar a ver oportunidades en vez de crisis; una forma muy fácil es saber cómo están cambiando los hábitos de los compradores e identificar cuales pueden perdurar. Este post te servirá para identificar los 4 tipos de compradores durante la pandemia, sin importar en qué sector se encuentre tu negocio.
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Estos 4 tipos de compradores durante el COVID-19 son los que actualmente están rigiendo las estrategias de gestión comercial y marketing de los negocios.
El controlador
En esta categoría de comprador podemos encontrar a todos aquellos que quedaron sin empleo. Para ellos integrarse nuevamente al mercado laboral es difícil por lo que tendrá un control excesivo de sus gastos. Sus objetivos de compra se limitarán a artículos de primera necesidad, huyendo de todo aquello que se considere un capricho.
Para satisfacer las necesidades de éste comprador, los emprendedores deben centrarse en ofrecer un surtido básico de sus productos. Esto no quiere decir que se deben abaratar nuestros productos o servicios, sino de ser capaces de tener una referencia de valor añadido que puede ser vendido a un precio adecuado.
Las empresas que tengan un buen equilibrio entre calidad y precio serán las que tendrán mayor ventaja frente a este comprador.
El emocional
Las PyMES tienen una gran oportunidad con los compradores emociones frente a la crisis que ésta pandemia ha generado, ya que son clientes que buscan apoyar a negocios pequeños y locales. Para impulsar la venta entre este tipo de compradores, requerirás de ofertas de fidelización.
El previsor
Este comprador teme más por el futuro que por el presente, es pesimista y busca productos y servicios que le faciliten la vida. Este comprador estará dispuesto a comprar una nueva casa, más grande, más tranquila y de ser posible, alejada de lo urbano. Esto porque no ha perdido su trabajo, por el contrario está haciendo home office.
Se trata de personas que siguen teniendo los mismos ingresos y pasan mucho tiempo más en casa. Estará dispuestos a pagar más dinero si esto representa una mejora en su calidad de vida. Las empresas que sepan hacer la vida más fácil a este tipo de compradores tendrán una ventaja sobre el resto.
El despreocupado
Este segmento es partidario de las compras compulsivas en artículos que son especialmente prioritarios. Con ellos se debe convencer que nuestro producto o servicio "se lo merece" después de meses de confinamiento y de lo que aún queda por llegar. De esta forma, el cliente ser irá satisfecho por hacer adquirido un bien que, aunque no lo necesite, se lo ha ganado con su esfuerzo.
Aunque para PyMEs y emprendedores, es una situación difícil debido a la baja de ingresos y la inestabilidad económica, las oportunidades se presentan aún en las crisis.
