El flujo de caja también conocido como flujo de liquidez, es un estado financiero en el que se detallan todos los ingresos y egresos de dinero durante un periodo de tiempo determinado. El flujo de caja, la solvencia y la rentabilidad son indicadores que debes medir constantemente, para conocer la capacidad de pago de tu negocio. A continuación te decimos cómo calcularlo.
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El flujo de liquidez proporciona información sobre la capacidad de pago del negocio, al tiempo que nos proporciona información sobre la salud financiera de la empresa. Para conocer cómo calcularlo primero hay que diferenciarlo dentro de sus 3 tipos.
Calcular el flujo de caja es muy sencillo. Se realiza agregando el beneficio neto de las amortizaciones realizadas en el periodo por medio de la siguiente fórmula:
Flujo de caja = Beneficios netos + Amortizaciones + Provisiones + Cuentas por pagar - Cuentas por cobrar
Cuando el estado de flujo es positivo indica que los ingresos de la empresa han sido mayores que sus gastos y si es negativo indica que has tenido más gastos que ingresos por lo que deberás revisar a detalle cuál es el problema.
El análisis de la capacidad de pago de tu negocio es clave y determinante para evaluar, por parte de las instituciones financieras al momento de otorgar un crédito PyME. Mientras mejor sea la salud financiera de negocio, es más probable que se autorice un crédito.